La Rendición I

2 de diciembre de 2010
Una vez amé tanto a un hombre que dejé de existir: él lo era todo; yo, nada.
Alguien tiene que estar encima, alguien debajo. Uno al lado del otro es un aburrimiento. La igualdad niega el proceso, impide la acción. Pero estando uno encima y el otro debajo, se puede ir a la luna y volver antes de que dos iguales pacten quiébn paga, quién se folla a quién y quién es el culpable.
Sin embargo, en mi transformación no pasé de abajo arriba, sino de abajo abajo: de mi deplorable sumisión empcional a mi bendita sumisión sexual.

Extracto de "La Rendición", de Toni Bentley

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy cierto, quién no se vio arriba o abajo en una relación? estar tan abajo es rendirse también a una bendita sumisión

hermoso fragmento, ahora quiero más

L dijo...

como que vi mi vida en esas palabras,
bendito dolor,
maldita cosa que me hizo tan bien.
es el precio a pagar por amar de verdad

Geisha dijo...

Oscuro: voy a subir mas

Menage: bonitas y verdaderas palabras

L dijo...

es el dolor mas doloroso que senti en mi vida
y no se va

Geisha dijo...

El tiempo lo cura, si uno tiene ganas de sanar...