Descendimos nuevamente a ese lugar. Oscuro, lleno de gente extraña con el rostro desfigurado de placer y morbo. Escucho gemidos, veo cuerpos desnudos y semidesnudos, percibo en el aire el olor a sexo, intenso, que me atrae… Voy pasando por cuartos donde se confunden las piernas, con las manos, con los cuerpos. No me importa quienes son, si son lindos o no, si son grandes o no. Sólo agradezco a la oscuridad, que es fundamental para poder entregarme sin dudar.
De su mano, como siempre, me aventuro en los pasillos laberínticos de este paraíso infernal y me voy perdiendo… Él nunca me suelta, algo de miedo, algo de duda, y esa tendencia a querer hacerme sentir suya siempre. Yo no lo suelto, pero tampoco lo miro, lo percibo detrás de mí y lo invito a jugar conmigo.
Finalmente nos detenemos, y con mi mirada le ruego que me deje hacer. Bajo lentamente a descubrirlo para llevarlo a mi boca. Curiosos observan, y él se va excitando cada vez más, y aunque trata de no ser tan evidente, yo puedo sentirlo. Cada tanto me frena, para que no lo haga acabar.
Y nuevamente, en medio del infierno, me siento perfecta.
Me toca, sus manos son la gloria, lo recuerdo. Le regalo un orgasmo porque me lo pide, a él y a todos los que observan. Me gusta acabar parada, puedo sentir como la energía de mi centro baja a mis raíces y me ancla. Quiero seguir, pero él se levanta y me lleva a su cama. Al llegar nos acurrucamos, yo con ganas de más, y él pensando que lo que me da nunca es suficiente.
Cartografías
Hace 4 años
3 comentarios:
la primer parte la conozco bien, no por mis medios pero la conozco
el párrafo final está buenisimo. La energía bajando...muy bueno
Me gustó mucho esto:
"Y nuevamente, en medio del infierno, me siento perfecta".
Se me vinieron imágenes como ráfagas. No es algo que pueda explicar, no tiene que ver con la entrada en un 100%. Pero te dejo un "gracias". Fue buena la movilización.
De nada =)
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